La cantante Rihanna se llevó todos los reflectores durante el show de medio tiempo del Super Bowl, en su primera actuación en vivo después de permanecer más de seis años fuera de los escenarios, deslumbro a todo el publico con su magnifica presentación.
Después de bastante tiempo sin presenciar en los escenarios a Rihanna, volvió y lo hizo en el exitoso medio tiempo del Super Bowl LVII. Entre gestos e indirectas, la cantante anuncia su segundo embarazo, con una audiencia estimada de 190 millones de espectadores, las redes sociales se volvieron locas cuando la cantante reveló la presencia de un invitado especial inesperado, nueve meses después de tener su primer hijo con su pareja A$AP Rocky, esta a la espera de su segundo, esta gran noticia sorprendió a todo el publico.
Puede que la cantante no estrenara nuevos temas durante su actuación en el Super Bowl del domingo, pero la pancita que lució en su lugar acaparó toda la atención en internet.
Mas allá de lo estrictamente deportivo, el descanso de la final de la Super Bowl acapara miradas mundiales por su siempre sorprendente actuación musical. Enfundada un jersey de seda bajo, un corsé de cuero entallado y un mono de vuelo en lona de algodón, todo de LOEWE. Rihanna apareció en una de las plataformas flotantes que se elevaban por encima del público, mientras un enjambre de bailarines enérgicos, todos vestidos de blanco, se congregaba debajo.
El público enloqueció cuando la cantante se lanzó de lleno con Better Have My Money, un comienzo un tanto irónico si se tiene en cuenta que no cobra por su actuación en el Super Bowl. La cantante repasó varios de sus éxitos más conocidos, con algunas de sus canciones más bailables y movidas, como Only Girl (In The World) y Where Have You Been. El espectáculo no faltó en el show, incluso después de que la bajaran al suelo. Se lanzaron fuegos artificiales por encima del estadio cuando la artista cantó la eufórica We Found Love.