Myke Towers se siente a gusto en España. “Me gustaría vivir un tiempito en Madrid, es una ciudad que no duerme, como yo”, confesó a Efe durante su tercera visita al país, la primera que hace de gira convertido en un astro mundial de la nueva generación del urbano latino, aunque él se vea más allá de etiquetas temporales.
“No me siento encasillado en una sola generación. Creo que soy uno de los que van a hacer música que va a trascender, que va a seguir sonando incluso cuando me muera”, afirmó seguro este joven músico puertorriqueño que con un solo LP, “Easy Money Baby”, reina en listas comerciales a uno y otro lado del Atlántico, a menudo con varias canciones de forma simultánea.
Nacido Michael Torres (Río Piedras, 1994), era un bebé cuando las primeras casettes de Daddy Yankee debieron comenzar a circular en puestos callejeros en su Puerto Rico natal y, de hecho, cita referencias clásicas del estilo como sus grandes referentes: Tego Calderón, Don Omar, Cosculluela…
“Me gusta mucho esa combinación de cantar y de rapeo. He estudiado lo mejor de ellos para que saliera esto”, contó durante una entrevista en la que analizó el secreto del éxito de cortes con su firma, como “Bandido” junto a Juhn, “La Playa”, “Pareja del año” con Sebastián Yatra o, más recientemente, “Bésame” con su compatriota Luis Fonsi.
Fue en 2016 cuando publicó su primera “mixtape”, titulada “El final del principio”, y en solo un lustro ha logrado codearse con estrellas internacionales como Cardi B, Becky G o Maluma. “Y los que faltan… Quiero mostrarle al mundo que Myke Towers puede trabajar con un artista grande o uno de la de nueva generación a quien apenas se conoce”, advierte.
Porque no olvida que el furor global por su música arrancó en 2019 con “Si se da”, fruto de su alianza con Farruko. “Fue un antes y un después en mi carrera, por eso siempre le tendré un respeto aparte. No había tenido una canción con un artista importante hasta él. Y si se convirtió en un clásico, fue porque más que un negocio salió del corazón”, subrayó.
Esas palabras no quieren decir que Towers no tenga una visión estratégica de cómo llegar y mantenerse en la cima. “Al principio enseñas lo que te gusta a ti, pero si quieres crecer, te tienes que dejar llevar por la gente, pero sin olvidar tu esencia, encontrando el punto intermedio”, comentó.
Atrás quedó la violencia que reinaba en su entorno y de la que logró escapar gracias a la música, pero que -paradójicamente- a menudo se exalta en los diferentes géneros urbanos.
“Es parte de esta música, como que hay que atravesar obstáculos para hacerte fuerte. Yo estoy orgulloso de lo que viví, pero es verdad que no querría que mi hijo pasara por ahí, porque no es tan fácil cómo se ve”, confesó, convencido a la vez de que “la música debe construir valores” y de que “salva vidas”.
Actualmente se encuentra embarcado en su primera gira mundial. En total, su “Myke Towers El Young King: The Tour” incluye 37 paradas en ciudades de Estados Unidos, México, Colombia, España y Suiza. Ya en enero ofrecerá su primer gran concierto como solista en su patria. “Esa es la plaza más importante para mí, Puerto Rico es Puerto Rico siempre en mi corazón”, concluye emocionado.