La canción “Aserejé“, lanzada por Las Ketchup en el año 2002, se convirtió en un fenómeno global con su ritmo contagioso y coreografía pegadiza. Sin embargo, la popularidad del tema también vino acompañada de controversia. Algunos grupos religiosos llegaron a catalogar la letra de la canción como una especie de “ritual satánico“, generando un debate que persiste hasta hoy.
El tema, que cuenta con más de 197 millones de reproducciones en YouTube, fue objeto de una investigación por parte de un grupo religioso de educadores mexicanos. Según este análisis, el protagonista de la canción, un personaje llamado Diego, habría sido vinculado con Lucifer, en parte debido a la interpretación de la frase “Diego tiene chulería” como una alabanza a un “diablo hermoso“. Además, el grupo sugirió que el título “Aserejé” era una invitación a la herejía.
La canción fue descrita por este grupo como una obra que, en su interpretación, parece hacer referencia a un estado alterado de conciencia, con menciones como “con la luna en las pupilas”. Según ellos, el tema sugiere que Diego está drogado durante una fiesta y que, aunque intenta disfrutar de la música, no lo logra por su estado.
En respuesta a las acusaciones, una de las integrantes del trío, Pilar Muñoz, defendió el tema. En declaraciones a la prensa, expresó su sorpresa por las interpretaciones y aclaró: “Cuando nos enteramos de eso nos sorprendió bastante. Pero sabemos que hay gente que inventa historias sin fundamento. Nuestra letra no tiene nada que ver con lo que se ha dicho”.
Por su parte, Manuel Ruiz Queco, el compositor y productor detrás de “Aserejé“, explicó en una entrevista para Diario Córdoba en 2016 que la canción nació como una parodia de la famosa pista de hip-hop “Rapper´s Delight” de The Sugarhill Gang. Ruiz Queco reveló que el estribillo de “Aserejé” fue una adaptación humorística y en español del icónico rap en inglés. “La idea surgió de un juego con mis hijos, y a partir de ahí creé al personaje de Diego, que baila esta canción en fiestas nocturnas”, dijo Queco.
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La controversia sobre la canción también ha dado lugar a especulaciones sobre posibles homenajes o significados ocultos. Sin embargo, Ruiz Queco ha desmentido cualquier conexión con rituales satánicos o con figuras como Diego Maradona. En realidad, el éxito de “Aserejé” se debe a su alegre y despreocupada parodia del primer rap de la historia, demostrando que, a veces, lo que parece un enigma tiene una explicación mucho más simple y divertida.
En resumen, el éxito global de “Aserejé” se basa en una mezcla de creatividad y humor, lejos de las teorías y rumores que han circulado sobre su contenido. La canción, lejos de tener connotaciones ocultas, representa un homenaje lúdico al rap clásico, consolidando a Las Ketchup como un fenómeno cultural del siglo XXI.
