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El actor de 37 años, Ed Westwick, se casó con su novia, la actriz Amy Jackson, de 32, en una boda de ensueño durante todo el fin de semana en la Costa Amalfitana, en Amalfi, Italia, tras comenzar su noviazgo en 2021 y comprometerse a finales de enero de este año.

Los actores británicos viajaron hasta la comuna italiana en jet privado junto a sus familiares y desde su llegada empezaron la celebración que llevaba temática de la Dolce Vita. Por ello, el primer día Ed y Amy recibieron a sus invitados con una recepción de bienvenida con un buffet de pizza, pasta y manjares tradicionales. 

El segundo día, los artistas y sus invitados disfrutaron de la puesta de sol de la Costa Amalfitana en alta mar. Y el gran día, dieron el “sí, acepto” en el Castillo de la Rocca Cilento con vistas al mar y rodeado de naturaleza.

Entre los invitados se encontraba Kelly Rutherford, compañera de reparto del intérprete en la serie “Gossip Girl”, donde él encarnó a Chuck Bass y ella a Lili van der Woodsen. 

“Me siento bendecida por tu amistad, por tener la oportunidad de trabajar contigo. Es un regalo verte crecer y enamorarte. Eres un hombre increíble”, expresó Kelly. 

Por su lado, Ed compartió la primera fotografía después de casarse y escribió: “El viaje acaba de comenzar”.

La boda de Ed Westwick y Amy Jackson en la Costa Amalfitana y el Cilento

“Nos enamoramos de Italia por su extraordinario estilo, su deliciosa comida y su profundo sentido de la familia: ¡era el destino perfecto para nosotros! La Costa Amalfitana, con su romanticismo atemporal y su encanto vintage, era el lugar perfecto para nuestra celebración”, recuerdan los novios.

El evento comenzó el viernes con un crucero al atardecer a bordo del Motonave Patrizia. “Navegamos por la costa de Ravello, Positano y Sorrento, parando en Capri para darnos un chapuzón mientras el sol se ponía tras las famosas rocas Faraglioni. El segundo día fue nuestro Gran Día, y tuvo lugar en el histórico castillo de Rocca Cilento, un castillo del siglo XVI enclavado en las colinas del sur de Italia con vistas panorámicas al mar”.

El tercer y último día, los novios recibieron a los invitados en el Giardini Del Fuenti, en la histórica Vietri Sul Mare, un pintoresco jardín y club de playa excavado en la roca de la Costa Amalfitana. “Era el escenario perfecto para un brunch italiano de estilo familiar bajo los limoneros”. A continuación hubo una tarde de relax, durante la cual los invitados pudieron tomar el sol y admirar las hermosas vistas.

La boda se celebró en Cilento, especificamente en el Castello di Rocca Cilento, un castillo del siglo XVI recientemente renovado por la familia Sgueglia, que posee unas vistas impresionantes. La ceremonia tuvo lugar en la terraza al atardecer, a las 5 de la tarde.

Su historia de amor

Ed Westwick y Amy Jackson se conocieron en 2021 durante un evento de Aston Martin en el circuito de Silverstone. “Él estaba allí con su amigo Scott, al que yo conocía bien, así que fui a saludarle. Pasamos un típico día de chicos, con paseos en coche, cervezas (sin alcohol) y muchas risas. Congeniamos enseguida… ¡Y superé el tiempo de Ed en la carrera!”, confiesa Amy.

Al poco tiempo se dieron cuenta de que compartían la misma pasión por los perros: “A Ed se le ocurrió sacar a pasea a nuestros perros, Herbert y Humphrey, y luego a tomar un café por Hampstead Heath, Londres, donde yo acababa de mudarme. Habíamos planeado explorar el barrio, pero en lugar de eso nos sentamos en la esquina de un acogedor café y pasamos allí cinco horas, hablando sin parar”, recuerda.

Después empezaron meses de citas divertidas: “Fuimos a un concierto de Red Hot Chilli Peppers en Sevilla, descubrimos un salón secreto de Soho de los años 90 y nos fuimos de excursión por todo el país. Por aquel entonces, mi hijo Andreas estaba obsesionado con los dinosaurios y el día antes de conocerse, Ed y yo estábamos en el Camden Market cuando se encontró unas figuras de dinosaurio, que le hicieron mucha gracia. Ni que decir que las compró y se las puso, ¡y fue todo un éxito! Le agradecí mucho el esfuerzo que hizo para que todo saliera bien en ese primer encuentro, aunque tuviera que lucir un poco tonto. Fue perfecto: tengo una foto genial de los dos dando este paseo, ¡con Ed llevando con orgullo su disfraz de dinosaurio!”, rememora nostalgicamente la novia.