“Santo Domingo no te vayas”, con esas palabras se dio inicio al concierto de Camilo en el Teatro Nacional, donde hubo complicidad entre artista y público entre aplausos, júbilo y mucha energía.
Un evento donde hasta niños/as se mostraban extasiados ante la presencia del cantante colombiano cuya interacción con su “tribu” alteró los esquemas en la principal sala de teatro del país. Las luces, el sonido y la felicidad que reinaban en el ambiente demostraron porque Camilo es parte del top de los artistas favoritos de la nueva camada musical.
Los espectadores, un grupo compuesto por personas de todas las edades, desde antes de iniciar el gran evento transcurrido en el Teatro Nacional Eduardo Brito ya estaban aclamando a Camilo y su repertorio musical. Era tanta la algarabía y emoción por parte de la fanaticada que no hubo canción que no se cantara y bailara en la sala. No acababa bien un tema y ya ellos pedían más y más.
Con la presencia de su amada Evaluna, con quien interpretó temas como ‘Machu picchu’, ‘Por primera vez’ e ‘Índigo’, la pareja brilló y mostró su amor por todo lo alto. Evaluna, a pesar de encontrarse en estado de gestación, bailó y cantó con la fuerza y alegría que la caracteriza junto a su esposo.
El artista colombiano expresó en varias ocasiones lo feliz que se sentía en su primera vez presentándose en el país, y lo transmitió con cada interpretación desde el inicio con ‘Favorito’ hasta que concluyó con el tema ‘Vida de rico’. Habló sobre su experiencia en República Dominicana y cómo el país lo inspiró a componer sus canciones más bonitas, según él.
En un momento, dentro de la euforia y las ovaciones del público, Camilo sacaba momentos para charlar amenamente con sus espectadores, incluso subiendo al escenario a una niña llamada Silvana, de 5 años de edad.
También recibió con mucho aprecio diversos obsequios de parte de sus fanáticos en el transcurso de la actividad.
El concierto contó con invitados como El Alfa, con quien interpretó la bachata ‘Bebé’ y se mostró agradecido con este por abrirle las puertas y por la humildad con que lo acogió; y su suegro Ricardo Montaner, quien le brindó unas palabras sobre cómo el artista le había recordado a su primer concierto en el país, que fue justamente en el Teatro Nacional y le regaló al público junto a su hijo, como lo considera él, uno de sus emblemáticos temas ‘Bésame’.
Tras el cierre con broche de oro de Camilo con sus invitados, a la salida del Teatro Nacional, una pareja de tórtolos decidió darse un rotundo sí, ganándose los suspiros del público presente. Sin duda, fue un concierto inolvidable y la tribu espera con ansias su regreso a los escenarios del país.