Cada 21 de septiembre, el intercambio de flores amarillas cobra un significado especial. Se trata de una práctica a través de la cual se expresa interés, cariño o amor a las personas especiales, que ha cobrado auge de la mano de plataformas como Instagram y TikTok. Pero ¿sabes de dónde surge esta tradición moderna?
El origen se relaciona con la serie juvenil argentina Floricienta, emitida en 2004. En uno de los episodios, la protagonista, Florencia Santillán recibe flores amarillas de Franco Fritzenwalden, un gesto que marcó el inicio de la primavera.
Además, la serie incluye la emblemática canción “Flores amarillas“, la cual celebra la belleza de las relaciones, la magia de la infancia y el poder de los sueños. Este mensaje resuena profundamente en quienes crecieron con la serie juvenil, evocando recuerdos de inocencia y alegría compartida.
La razón por la que se escogió el 21 de septiembre para este acto de cariño y conexión es porque la fecha marca el equinoccio de primavera en el hemisferio sur. Este año, la tendencia se ha reactivado aún más por el estreno de la serie “Margarita“, que da continuidad a la historia de Floricienta.
Esta combinación de recuerdos de la infancia y popularidad en las redes sociales ha transformado las flores amarillas en un emblema moderno de la primavera y el amor, sobre todo entre la juventud que siguió la serie.